Este objetivo es un "gama de entrada" de Sigma, según precios en tiendas el mas barato de todos. El precio es su principal argumento, seguido de una utilidad contrastada sobre el papel aunque algo mermada sobre el terreno. ¿Merece la pena su bajo precio con respecto a sus prestaciones?
Esta opinión escrita está basada en el objetivo montado en una cámara de formato APS-C (DX - Nikon D80), aunque este está originalmente diseñado para cámaras de 35mm full-frame, según la página del fabricante. Nota: existen dos versiones, una mas moderna con motor de autofoco en el cuerpo para su uso con cámaras con motor de enfoque en el cuerpo.
No tiene anillo de control de apertura manual, por lo que deberemos usar los controles digitales de la cámara. Dispone de anillos de zoom y enfoque, y de dos interruptores, de normal/macro(200-300) y de AF/M. Este último control resulta una función duplicada usado en la Nikon D80, para pasar de control manual a AF y viceversa deberemos seleccionar indistintamente la función desde el objetivo como desde la cámara, sabiendo que para que funcione el AF tendrán que estar activados los dos. El control de enfoque manual sólo es posible con el interruptor del objetivo en manual.
El objetivo no es especialmente ligero, y para mi gusto un poco aparatoso de volumen sobre todo desplegado y con el parasol. La montura trasera es metálica y da sensación de solidez. El parasol es enorme y tiene una zona estriada como para usar el foco manual, pero si la usamos nos quedamos con el parasol en la mano con facilidad, se acaba saliendo de la rosca que lo ancla al objetivo, parece un error de diseño bastante infantil.
El enfoque manual no es demasiado agradable porque, sobre todo en focales grandes, parece tener algo de holgura, lo que no da muy buena sensación que digamos. Y resulta peor todavía en la función macro, en la que el giro de enfoque es todavía mayor, la holgura es notoria. Este giro del foco manual se lleva la peor nota de todos los objetivos que haya podido probar hasta la fecha.
Tiene botones de control de modo auto-manual y de modo normal-macro. Para poder pasar a macro tendremos que hacer zoom por encima de 200mm, y para volver de la función macro a normal tendremos que volver al rango de enfoque a infinito en 200mm. Es bueno ejercitarse realizando esta operación de cambio de modo macro/normal de forma totalmente manual, requiere un pequeño aprendizaje previo para no perder luego demasiado tiempo sobre el terreno.
El uso de una apertura grande de F4 a F6 en focales grandes supone una nitidez escasa en el centro de la imagen y peor todavía en los bordes exteriores de la foto, donde es imposible recuperar detalle fino, ni con filtros digitales de enfoque avanzados. Para conseguir una nitidez óptima nos tendremos que conformar con una apertura de F8, con la consiguiente pérdida de luminosidad. Y en las aperturas mas cerradas tampoco ganamos nitidez por una difracción exagerada que no compensa, a partir de f16-f20 ganamos profundidad de campo pero perdemos bastante detalle.
El zoom es la prestación mas llamativa de este objetivo, de 70-300 mm (FX) o 105-450 mm en DX - equivalente. El barrido del zoom completo se realiza en 70º de giro, es un valor correcto; el anillo de accionamiento del zoom tiene una dureza un poco acusada pero da sensación de calidad (no así el anillo de enfoque).
El auto-enfoque de este objetivo es lentísimo. Y bastante ruidoso, por cierto. Es lentísimo porque entre otras el anillo tiene que girar bastante para cubrir el recorrido completo. Por otra parte en modo de enfoque continuo me parece simplemente correcto, aprobado justito, y aunque a veces se bloquee. Pero si pierde definitivamente el foco, y suele pasar, nos hace perder demasiadas fotos.
Por contra el enfoque manual permite enfocar con precisión, debido al amplio giro del anillo de enfoque. En la función macro, este diámetro de giro se amplia y permite un enfoque muy fino. En este sentido muy bien, pero en macro o distancias cortas cámara en mano el auto-enfoque en AF-auto resulta errático y no da tiempo a bloquear el enfoque con la D80, ¿será porque funciona demasiado bien? En macro es conveniente y casi obligado pasar a enfoque manual si disparamos a pulso, o hacerlo en modo AF-S.
El extremo del objetivo no gira al cambiar de focal, pero si al enfocar, se pueden usar filtros de 58mm, y a mí no me viñetea nada si le acoplo hasta cuatro filtros Hoya de 58mm a la vez, ni en la focal mas corta de 70mm, ni a la máxima apertura de F4.
Este objetivo tiene unas aberraciones cromáticas exageradas, difíciles o imposibles de corregir, sobre todo en la función macro en situaciones de alto contraste (fotografía de naturaleza con exposición de luz solar). No he tenido ocasión de probar la variante APO de este objetivo de Sigma, pero imagino que mejorará bastante este apartado, que se come literalmente las expectativas de lo que se puede esperar de un zoom de este tipo con magnificación 1:2 (tamaño del área de la escena con respecto al tamaño del sensor de la cámara). He llegado a registrar aberraciones en franjas de hasta diez pixels. Es conveniente fotografiar escenas bien iluminadas, es decir con bajos niveles de contraste lumínico entre zonas enfocadas y desenfocadas.
Nota: para solucionar las aberraciones cromáticas hay mucho software freeware disponible, por ejemplo Irfanview que cuenta con una lista de plug-ins y add-ons bastante buenos, diría buenísimos. Otro es Raw Therapee, un software lentísimo de ejecución pero completísimo, extremadamente completo para una edición digital avanzada, y, como Irfanview, no se limita al formato RAW, permite interactuar con todos los formatos de imagen. Raw Therapee requiere de un ordenador potente, obligatoriamente. Por su parte Irfanview es el software con utilidades de tratamiento de imagen mas rápido que conozca.
El desenfoque de este zoom es bastante potente, si es lo que se busca. La cantidad de este desenfoque es mayor que su calidad, aunque tenga un diafragma de nueve láminas no consigue acabar de convencer comparándolo con objetivos profesionales. Es seguramente debido a la calidad de la óptica y de la disposición interna de las lentes. Si fotografiamos escenas con desenfoque extremo como en macro 1:2 en la focal máxima el fondo no acusará la escasa calidad del desenfoque, puesto que en la mayoría de escenas será de un color casi uniforme, eso sí. Pero cuidado con las aberraciones cromáticas en este caso, son muy fuertes y los bordes de los objetos enfocados contrastados con el fondo se difuminan de forma que no es posible recuperarlos completamente en edición digital.
Este objetivo es simplemente inutilizable en el extremo 300mm si no es en situaciones muy muy favorables de luz o con trípode, no es lo mejor para publicar fotos en alta resolución, aunque sí para Internet, eso siempre, en esto no falla porque la resolución no es importante en la web. En la focal de 70mm la nitidez es normal, para paisajes, incluso con aperturas amplias de f/4 a f/6, y el desenfoque mas o menos aceptable si buscamos que el fondo de nuestra escena no sea muy contrastado, he llegado a conseguir fotos bastante agradables. Para distancias focales largas es necesario el uso de un buen trípode o un punto de apoyo alternativo, este objetivo no lleva estabilizador y no es precisamente luminoso ni rápido ni nítido. En tal caso yo pongo el diafragma en f/8 y de ahí no lo muevo, o toca sacarle partido al modo A de los modos PASM, con f/8 fijo y prioridad a la apertura con "ISO AUTO" (y mas vale tener un cuerpo de cámara con poco ruido a ISOs altos).
En definitiva, obviando la interminable lista de peros para usos avanzados, es un buen objetivo para iniciarse, con un zoom 70-300mm permitiendo macro 1:2. Obliga a aprender, puesto que sacarle todo el partido no será demasiado fácil, por precio perfecto y muy recomendable para entrar a conocer el mundo réflex y la fotografía macro. Si te divertes aprendiendo con este Sigma y llegas a conseguir buenas fotos con él, disfrutarás luego con un objetivo de calidad superior.
fotos y opinión por ©2012 Juan Gaston Alonso para masternautas.com