Tengo en este momento estos dos objetivos juntos en la vitrina, un buen momento para sacarlos y compararlos frente a frente en las mismas situaciones.
Los dos objetivos se empezaron a comercializar en las mismas fechas en el año 1978, es decir hace cerca de cuarenta años. A mis manos han llegado dos unidades en perfecto estado, a pesar de la edad de estos modelos. Sus diseños fueron hechos para durar, y parece que la óptica se mantiene en la fabricación de los 50mm 1.8 actuales. Siendo precursor el Nikon 50mm Series E con sus 6 elementos en 5 grupos, diseño de base de este primero sobre el que Nikon evolucionaría el modelo segundo, el Nikkor AF 50mm 1.8s MK1 y posteriores. Tras esta breve presentación los tenemos aquí frente a frente.
Los dos modelos son distintos en cuanto a concepto. El 50mm E es un objetivo de accionamiento manual de foco y diafragma, y el 50mm AF admite el autofoco y el diafragmado controlado por la cámara. Siendo todavía este modelo AF dependiente del motor de enfoque del cuerpo en el que vaya montado, para distinguirlo de los recientes objetivos AF-S que integran el motor ASF en el mismo objetivo. El peso es muy parecido, 130 y 155 gramos.
El giro del foco del 50mm E es ligeramente mas corto y la anilla de enfoque es sensiblemente mas cómoda que la del modelo AF, que es angosta y casi imposible de manejar en modo manual y peor si le montamos un parasol, teniendo que enfocar con el mismo parasol en este caso. A favor del modelo AF, su autofoco funciona con todas las Nikon digitales con motor de enfoque en el cuerpo, es decir la mayoría exceptuando los modelos "de entrada".
Básicamente la mayor diferencia entre estos dos diseños ópticos es la distancia mínima de enfoque. De 45cms en el modelo AF y de 60cm en el modelo Serie E.
Debido seguramente a la diferencia de distancia mínima de enfoque del 50mm E a 62-65cm, el modelo AF enfoca mas cerca pero los resultados a la mas corta distancia son un poco mas suaves a la máxima apertura a 45cm que los del objetivo manual a 60cm. En cualquier caso los dos destilan nitidez a raudales en esta situación. La cámara D200 sin embargo ha dado mediciones de temperatura de color distintas, de 4450º para el objetivo AF y de 4750º para el Series E.
En la corta distancia, a 62-65cm, la nitidez de los dos objetivos es pareja, muy alta, y dificil de medir la diferencia. No he conseguido enfocar en manual como en AF y la escasa profundidad de campo a f1.8 da resultados dispares al no conseguir igualar el foco manual del E con el autofocus del AF. Así lo mismo para todas las pruebas a distintos diafragmas a esta misma distancia, pero en definitiva las esquinas están perfectamente definidas y parecen hermanos gemelos.
En la distancia de retrato, unos tres metros, las pruebas son mas fiables puesto que el foco ya es prácticamente idéntico. En este caso el 50mm E gana en el centro del fotograma, por poco, y es dato curioso porque es donde el modelo AF debería haber clavado el foco. Pasa lo mismo a 2.8, el centro es mejor el del 50mm E y se igualan en las esquinas. De F4 a F8 se igualan en todo el fotograma, y a F11 el Af se ve tocado por un puntito más de difracción que el Series E, a F16 se igualan y a F22 es el Series E quién pierde por un puntito. En esta distancia las mediciones de temperaturas de luz se han ido a 4350º con el AF, y a 4250º con el E.
En la larga distancia los dos objetivos vuelven a distanciarse en la medición de temperatura, 4500º el E y 4900º el AF en la escena representada. El foco a f1.8 no presenta diferencias, a f2.8 los dos presentan unos resultados soberbios hasta f11, y a F16 y F22 la resolución baja por la difracción. En general las diferencias enfocando lejos son inexistentes.
En las pruebas realizadas con los objetivos invertidos con tubos de extensión se ven resultados bastante parecidos. Los dos objetivos parecen tener la misma resolución, quizás con mayor contraste a favor del 50mm AF, mientras el Series E se resiste mejor a los brillos y destellos. Pero las diferencias son menores y la calidad y nitidez espectaculares en los dos casos.
La gran diferencia entre estos dos modelos está en la distancia mínima de enfoque, que permite al modelo AF mayores acercamientos, y en su capacidad de foco manual y AF respectivamente. Los demás aspectos son básicamente estéticos. El bokeh es muy similar y característico de esta familia de objetivos normales f1.8, una saga clásica de Nikon que ofrece muy buenos resultados. ¿Con cual me quedo? Pues me he quedado con el Series E, para el uso que le doy no necesito AF y por lo demás los resultados son los mismos, el modelo AF ha volado hacía un nuevo hogar.
fotos y textos por ©2015 Juan Gaston Alonso para masternautas.com